1. Lavarte la cara solo con agua o con jabón corporal
Error: No limpiar bien tu rostro hace que los poros se tapen y los productos no funcionen.
Cómo evitarlo: Usa un limpiador suave, idealmente uno específico para tu tipo de piel. Mañana y noche. No necesitas tallarte fuerte, solo masajear suavemente.
2. Exfoliar de más (o de menos)
Error: Exfoliar todos los días puede irritar la piel; no exfoliar nunca puede dejarla apagada y con textura.
Cómo evitarlo: 1–2 veces por semana es lo ideal. Si es exfoliante químico, como AHA/BHA, checa que tu piel lo tolere. Siempre hidrata después.
3. Usar demasiados productos a la vez
Error: Pensar que entre más productos uses, más rápido verás resultados.
Cómo evitarlo: Menos es más. Una rutina básica (limpieza + hidratante + protector solar) es suficiente. Ve agregando productos extras poco a poco para no saturar tu piel.
4. No usar protector solar todos los días
Error: Evitar el SPF porque está nublado, estás en casa o “no sales”.
Cómo evitarlo: Aplícalo diario, aunque estés dentro de casa. La luz de pantallas y ventanas también daña la piel. Busca SPF de amplio espectro y reaplica cada 3–4 horas.
5. No dejar que los productos se absorban
Error: Ponerte todo al mismo tiempo y correr.
Cómo evitarlo: Espera unos 30–60 segundos entre capas. Así cada producto tiene tiempo de actuar y reduces el riesgo de que se hagan bolitas (pilling).
6. Dormirte sin desmaquillarte
Error: Sí, aunque “solo fue tantita base”.
Cómo evitarlo: Usa agua micelar, bálsamo o aceite desmaquillante antes de tu limpiador. Tu piel respira mejor y previene brotes.
7. No hidratar si tienes piel grasa
Error: Pensar que la hidratante te va a sacar grasa o granitos.
Cómo evitarlo: Elige una crema ligera tipo gel. La piel grasa también necesita hidratación para regular el sebo.
8. No adaptar tu rutina a tu tipo de piel
Error: Copiar lo que ves en TikTok aunque no sea para ti.
Cómo evitarlo: Si tienes piel mixta, seca, grasa o sensible, busca productos pensados para esa condición. Lo que funciona para alguien más no siempre te va a funcionar.
9. Cambiar de productos cada semana
Error: No darle tiempo a tu piel de reaccionar a un producto.
Cómo evitarlo: Dale mínimo 4 semanas a cualquier tratamiento. La constancia es tu mejor amiga.
10. No mirar las fechas de caducidad
Error: Usar skincare vencido o productos abiertos desde hace años.
Cómo evitarlo: Checa el símbolo PAO (el botecito con “6M”, “12M”, etc.) y reemplaza lo que ya pasó ese tiempo.
Cuidar tu piel no tiene que ser complicado. Basta con evitar estos errores, ser constante y elegir productos adecuados para ti. Tu piel es más noble de lo que crees: cuando la tratas bien, te lo devuelve en brillo, suavidad y salud.
No olvides seguirnos en redes sociales:
Facebook TikTok Instagram
¡Lleva la revista Tú en tu tablet o celular!: Disfruta la Edición.