Ary Tenorio es una joven brillante, llena de carisma, bondad y un gran sentido del humor. Recientemente hizo su debut actoral con “Mamá Reinventada”, donde le dio vida a Ana. En esta entrevista exclusiva la creadora de contenido nos cuenta todo sobre esta experiencia, y al final nos reveló detalles sobre el siguiente proyecto que ya está “cocinando”. Esto fue lo que nos dijo…
Este fue tu debut actoral, ¿cómo te sientes con eso?
La verdad es que es mi debut actoral y para una película que estuvo en los cines de todo México. Yo me siento como que lo veo y no lo creo. No me imaginé que yo iba a ver este bello rostro en esa pantalla tan grande en el cine. Me siento muy feliz y muy satisfecha. A veces siento que uno tiene que detenerse a felicitarse, que a veces estamos tan pendientes de qué sigue, qué sigue, qué sigue, que no nos detenemos a ver lo que hemos hecho. Me siento muy satisfecha con el resultado, estoy muy feliz con este proyecto y, sobre todo, muy agradecida con la oportunidad de haber trabajado con gente tan talentosa, con una trayectoria increíble como es Erika Buenfil, Michelle Renaud, Nicolasa Ortiz.
Tú vas a interpretar a un personaje que se llama Ana, ¿qué nos puedes decir sobre ella?
Sin dar mucho spoiler, Ana es una amiga ideal. Es una compañera, es cómplice, siempre está ahí contigo. Sabes que las amigas luego decimos: si vamos a hacer algo, está bien pero lo hacemos juntas. Ana es ese tipo de persona. Siempre está ahí apoyándote y sobre todo es una persona justa.
¿Crees que, en algún sentido, Ana se parezca a ti? Y si sí, ¿eso te facilitó el interpretarla?
Sí, totalmente. Creo que Ana y Ary tienen un parecido. Sobretodo que cuando no nos gusta algo, es muy difícil ocultarlo. Yo soy el tipo de persona que dice “yo no voy a opinar”, y hace una cara. La cara te delata. Entonces siento que Ana y Ary se parecen en ese sentido y eso lo hizo mucho más fácil. ¿Y sabes qué? No tuve que modificar el acento. Me dieron la libertad de ser yo.
¿Tuviste que hacer algo para empezar a actuar e incursionar en esto?
Sí, de hecho me empecé a preparar desde el casting. Cuando a mí me llegó el casting, sinceramente yo no lo quería hacer porque no quería hacer algo que quedara mal. Me daba mucha pena que fueran a decir “¿esta loca de dónde salió?”. Busqué ayuda, tuve coach para la pronunciación, neutralización de acento. Luego me enseñaron que no es solo aprenderte el diálogo, es tu expresión corporal, tu movimiento, aprender a leer entre líneas. Que muchas veces sí, el diálogo dice “no quiero”, pero ¿qué tal que va más allá? Entendí y aprendí que para estar en eso de la actuación, aunque tú salgas en una escena, tú tienes que saber de dónde viene la historia, para dónde va y por qué. Esto para que tengas un mejor contexto de qué está pasando.
Aprendí todo esto desde el casting para presentarlo, y cuando lo presenté, me enteré, me avisaron que me había quedado. Cuando esto pasó, busqué aún más ayuda. Tuve una coach que me ayudó. Practicamos las escenas 20 mil veces. Una tiende a buscar la perfección. Y cuando llegué al set de grabación, como que tenía una carga encima porque, claro, a mí me daba nervios que era mi primera vez en un set de grabación. Y el equipo fue tan lindo. Fueron tan lindos.
Esta es una película producida, dirigida y protagonizada por mujeres. Y fueron tan bonitas. Me hicieron sentir en un lugar seguro, en un lugar cómodo. Eso hizo que ese peso que yo traía en la espalda desapareciera porque me hicieron sentir cómoda, en confianza.
¿Cómo llegó el papel a ti? ¿Y cómo fue para ti decidir sí lanzarte?
Mira, mi agencia tiene una vertiente y pues también está la actuación. Un día dijeron: “Está el casting de esta película, están buscando a este personaje, el personaje puede ir muy bien contigo, pero tienes que presentar un casting”. De esa manera fue que llegó el proyecto a mí, a través de la agencia.
Ahí yo dije: “¿Será que sí? Lo voy a intentar porque ¿por qué no? Lo peor que puede pasar es que no me llamen”. Dije, “¿Por qué me voy a cerrar a aprender algo nuevo?”.
¿Cómo fue el momento en el que te enteraste que sí habías quedado?
Literalmente me avisaron por el grupo de WhatsApp de la agencia. Me dijeron: “Ay, pues, Ary, te quedaste en el casting”. Y yo: “¿Qué? ¿Cómo?”. Yo no caí en cuenta de lo que estaba pasando hasta que salió la película. Porque una cosa es ir a grabación y otra es ver el resultado.
¿Cómo fue guardar el secreto de que estabas haciendo una película?
Te quema por dentro. Tú dices, “Es que lo quiero decir”. Sí es difícil sobre todo porque es algo que te emociona mucho, lo quieres compartir con la audiencia, con los seguidores. Lo que sí dije fue que estaba en unos cursos, pero ya no dije nada más. Fue difícil guardar el secreto.
¿Después de esta experiencia te gustaría seguir actuando?
Totalmente. Sí lo seguiría haciendo. Me encantó, me divirtió. Si me parece otra oportunidad en el camino, sin duda me prepararía aún más y le echaría muchísimas ganas.
¿Qué sigue para ti? ¿Qué otros proyectos tienes en la mira?
Ahora mismo lo que te puedo contar sin revelar tanto es que se viene un proyecto sabroso. Rico. Rico. Sabroso y rico. Y que no ha de tardar tanto. Ya está por… abrir. Sabroso, rico, por abrir.