La moda cambia cada temporada, pero hay piezas que son como tus BFF: siempre están ahí cuando no sabes qué ponerte y jamás fallan. Son esas prendas que combinan con todo, te hacen ver chic sin esfuerzo y duran años en tu clóset.
Lo aesthetic no tiene que ser caro: basta con pequeños detalles, un mood creativo y ganas de jugar con tu estilo. Tu cuarto puede ser ese refugio cute y cozy que siempre soñaste.