Eres guapa y lista, ¡pero nadie se te acerca!
Quieres saber por qué ese regordete alado simplemente se hace el desaparecido cuando más lo necesitas. Ser víctima de una de las flechas de Cupido requiere de más que pura suerte.
Checa:
1. Tienes una mala actitud: no sólo con los chicos sino contigo misma, además de una bajísima autoestima y eso provoca que te paralices, te quedes callada y en estado de coma frente al chico que te gusta.
2. Cupido se esconde detrás de tu miedo: Deja de sentir pena y atrévete a ser una de esas chicas que interactúan en la vida real, no dejes de disfrutar y experimentar lo mejor de ti sólo por miedo. ¡Vale la pena intentarlo!
3. Deja las fachas: Cuidar tu imagen no es vanidad, es una acción que demuestra cuánto te quieres. Deja de ser distraída con tu arreglo personal, échale ganitas, estar a la moda y bonita no significa que debas gastar una fortuna.
4. Los asustas con tu desesperación: Tratas de pescar lo que sea con tal de salir de ese calabazo que llamas soltería, ¡no te claves! Parecer urgida es un repelente de chicos. Sé paciente y checa tus estrategias para llamar la atención.
5. Eres un ratoncito de biblioteca: No se trata de botar tus cuadernos, es admirable tu dedicación en el cole, ¡pero no exageres! Trata de organizar tu agenda y darte espacio para la diversión. Date la oportunidad para enamorarte, Cupido te vio tan ocupada, ¡que partió sin que te dieras cuenta!
Recuerda que el amor llega solito, no tienes que hacer nada extraordinario para atrapar a un chico. Sé natural, sencilla, sólo tú misma en todo momento.
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