Eres de las que no saben qué decir después de hola ¿Sudas, te ruborizas y te duele la panza cuando te toca exponer en clase?
Eres de las que no saben qué decir después de un “hola” ¿Sudas?, ¿te pones como jitomate o te duele la panza cuando te toca exponer en clase?
Pon en práctica lo siguiente para aprender a relacionarte con los demás. Sigue estos sencillos tips... y ¡mucha suerte!
1. ¿CUÁL ES EL CAMINO?
Piensa a conciencia hacia dónde te está llevando tu aislamiento y de qué cosas tan maravillosas estás privándote. Sentirás coraje, y de ahí partirás.
2. CAMBIA DE CANAL
Piensa en ti misma como una chica exitosamente callada. Si eres introvertida no tienes que cambiar tu forma de ser si te sientes a gusto contigo misma. Lo malo viene cuando relacionarte con los demás te provoca sensaciones de estrés y sufres por ello.
3. APRENDE TODO LO QUE PUEDAS DE ESTA SENSACIÓN
Y úsala para tu beneficio. Comprender la condición te ayudará a lidiar con la timidez. Si descubres la cantidad de niñas que se sienten así, lucharás contra ella.
4. PONTE METAS
Empezando por la que te asuste menos. Tal vez te gustaría ser capaz de empezar una conversación con un chico desconocido en una fiesta. Planea lo que vas a hacer y decir, practica con una amiga comprensiva o frente a un espejo.
Este simple, pero efectivo, ejercicio comenzará a inundarte de la confianza necesaria para iniciarte en el cambio. Luego, prueba con algo que te exija más esfuerzo. ¡Lo lograrás!
5. REPITE Y REFLEXIONA
Cada vez que percibas un hueco en el estómago...
Siéntate en un lugar cool y relaja tu cuerpo.
Deja caer la cabeza lentamente hacia delante.
Cierra los ojos y permanece así durante medio minuto; sentirás un agradable soporte.
Haz llegar a tu mente las frases:
“No hay razón para mi vergüenza”.
“Valgo mucho y soy capaz de triunfar”.
“Si me equivoco o no, ¿qué pasa?”.
“Confío en mí misma”.
“Me gusto tal como soy”.
Ahora, inspira hondo y levanta la cabeza, exhalando. Formándote una imagen tuya positiva, los demás te verán como te visualizas en tu mente. Realiza esta terapia de manera regular.
6. PIENSA CON BUENA VIBRA
Mira, las chicas tímidas son negativas, por eso cuando les hacen un cumplido o las felicitan por un logro, no se la creen. ¿Es tu caso? Busca y aquilata las reacciones positivas que recibes de los demás; escríbelas y apréndetelas hasta que se conviertan en parte de ti. La felicidad está asociada con la forma en que te miras.
7. RODÉATE DE PERSONAS QUE CONSIDERES LÍDERES.
En serio, estás a tiempo de comenzar a tomar las riendas de tu vida. No te arrepentirás de todo lo que conseguirás al cambiar. ¡Bien!
