Estos postres son ideales para cuando ya no puedes con el hambre
Bolitas de crema de cacao. En un recipiente combina crema de cacao, avena, miel, avellana tostada, semillas de chía y extracto de vainilla, elabora bolitas con la mezcla y refrigera. ¡Es como un chocolate crujiente! Otra gran forma de comer la manzana es mezclando crema de maní con yogur griego, decora con frutas deshidratadas. ¡Yummy! ¿Qué tal un sándwich de pepino con queso cheddar? Pudín de aguacate. Licúa un aguacate con chocolate negro, leche y extracto de vainilla hasta conseguir la consistencia de un puré. Aunque suena extraño es riquísimo.Esta receta es súper fácil, sólo derrite un poco de mantequilla con alguna salsa o chili fermentado, después baña las palomitas con la mezcla y listo. Aderezo de crema de maní con yogurt griego y miel. Puedes combinarlo con cualquier fruta. Derrite mantequilla de nueces y viertela sobre granola, después haz bolitas y refrigéralas por una semana. Tardan un poco en estar listas pero valen la pena. Yogurt griego, granola y moras. ¡Súper fácil y delicioso!Rollitos de plátano. Cubre una tortilla integral con crema de cacao o maní, luego agrega un plátano y enróllalo como un taco, corta por rebanadas y listo. Para un postre rapidísimo sólo combina gelatina con tu fruta preferida, como coco, naranja y frambuesas. Tostadas de aguacate. Tuesta una rebanada de pan de caja, cúbrela con un aguacate y agrega un poco de chile o especias de tu preferencia en polvo. ¡Te encantará! Yogurt griego con crema de maní y chispas de chocolate. Pan tostado con queso cottage, nueces de castilla y rebanadas de piña. ¡Un platillo excelente para cualquier momento del día! Sándwiches de manzana. Saca el corazón de una manzana, corta la parte superior e inferior y por la parte del centro. Luego agrega una capa de crema de maní y un poco de granola. Serán los sándwiches más deliciosos y sanos que hayas comido.
No necesitas comprar ropa nueva para verte aesthetic. A veces, lo que necesitas ya está esperándote en tu clóset, solo hace falta un poco de inspiración.
Todas hemos tenido esas noches en las que dormimos poco y al día siguiente el espejo no perdona. Pero tranquila: hay pequeños truquitos que salvan y te ayudan a que tu piel se vea fresca.
