Si mueres por un labial que no has encontrado en ningún lado, o de plano estás ahorrando, puedes hacerlo en casa con estos 7 sencillos pasos.
Hacer labiales en casa nunca fue tan fácil. Si a veces es imposible encontrar tu tono preferido o de plano estás ahorrando y ahorita no puedes gastar en un labial, checa estos sencillos pasos para hacer tu propio labial en casa ¡y tú decide qué color de lavios quieres!
1. Lo primero que necesitas hacer es conseguir crayones del tono del que quieres tu labial, un poco de aceite de coco, dos recipientes metálicos, una estufa y un estuche que pueda servir perfecto para guardar tu labial. (TIP: estuches de labiales viejos son ideales).
2. Una vez que tengas todo listo, debes pedir la ayuda de un adulto para poder manejar la onda de la estufa, ya que el proceso requiere derretir todo a baño maría.
3. Toma el color de crayón que escogiste para hacer tu labial y córtalo en 3 pedazos. Recuerda que a mayor cantidad de color más intenso será el tono que resultará.
4. Ya que hayas decidido la intensidad, coloca un recipiente con un poco de agua en la estufa hasta que hierva para después colocar el otro con una cucharada de aceite de coco hasta que éste quede totalmente líquido.
5. Cuando veas que está totalmente líquido, comienza a agregar los trocitos que cortaste de crayón poco a poco. No integres uno nuevo hasta que no esté completamente derretido el anterior.
6. Mezcla todo muy bien hasta que veas que se integraron completamente todos los ingredientes. Una vez hecho, vacíalo en el pequeño estuche que conseguiste y mételo al refri.
7. Pasadas dos horas, sácalo y pruébalo en tu mano par ver si el color fue el ideal. Si no es el color que querías, repite el proceso hasta que el tono que quieres se logre.
Tendrás los tonos que siempre has querido con tus labiales hechos en casa.
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